Seguramente, hayas escuchado hablar de la bolsa de horas como un sistema para poder repartir las horas de tus trabajadores de forma irregular a lo largo del año.

Ya sabes que es obligatorio tener un registro de la jornada de tus empleados donde quede reflejado su horario de salida y entrada de tal manera que se antena el máximo de horas pactadas en el convenio colectivo o el estatuto de los trabajadores. Por ello, es importante que antes de implantar un sistema de bolsa de horas en tu empresa tengas en cuenta algunas consideraciones.

Son una distribución irregular de la jornada

Con independencia de su denominación o funcionamiento y de la regulación del convenio, estas bolsas de horas constituyen una distribución irregular de la jornada y por lo tanto es importante tener en cuenta algunas consideraciones generales.

  • No podrán superarse las horas laborables.
  • Deberá respetarse el descanso mínimo de 12 horas entre jornadas.
  • Deberá respetarse el límite de día y medio ininterrumpido de descanso semanal, salvo que el convenio colectivo lo amplíe, que empezará a computar una vez finalizado el descanso entre jornadas.
  • La empresa podrá hacer la distribución irregular de la jornada hasta un 10% a lo largo del año de forma unilateral.
  • La empresa deberá comunicar con al menos cinco días de antelación la nueva distribución de la jornada.

Cómo implantar una bolsa de horas en la empresa

Una de las ventajas es que resulta más beneficioso para la empresa que las horas se constituyan como distribución irregular de la jornada y no como horas extra. Por un lado, la empresa tendrá 12 meses para compensar estas horas; por otro, no será necesario abonar el importe ni aplicar el límite de 80 horas.

El sistema de bolsa de horas debe constar por escrito a través de un contrato que se firme entre la empresa y el trabajado. Además, aconsejamos detallar en qué consiste este sistema para que los trabajadores sean conocedores del funcionamiento de este acuerdo.